Vaciar un piso después del fallecimiento de un familiar es una tarea emocionalmente difícil y, muchas veces, abrumadora. Sin embargo, seguir un proceso organizado puede ayudarte a sobrellevar el momento y gestionar la vivienda de forma más eficiente. Estos son los pasos recomendados:
1. Tomarse tiempo para revisar los objetos personales
Antes de contactar a una empresa de vaciado, es importante que la familia revise la vivienda con calma. Es posible que haya documentos importantes, recuerdos o pertenencias de valor sentimental que conviene conservar.
2. Clasificar los objetos
Una vez recogidos los objetos importantes, se recomienda separar el resto en categorías: lo que se quedará la familia, lo que puede donarse, lo que puede venderse y lo que debe desecharse. Esta clasificación facilita el trabajo posterior del equipo de vaciado.
3. Solicitar presupuesto de vaciado
El siguiente paso es contactar a una empresa especializada en vaciado de pisos. Lo ideal es que realicen una visita sin compromiso para valorar el trabajo: cantidad de muebles, presencia de trastero o altillos, accesibilidad del edificio, necesidad de desmontaje, etc. Así podrás obtener un presupuesto ajustado.
4. Realizar el vaciado completo
La empresa se encargará de retirar muebles, electrodomésticos, ropa, libros y todo tipo de enseres. También pueden gestionar el reciclaje, los puntos limpios y la donación de objetos en buen estado.
5. Limpieza final del inmueble
Tras el vaciado, es recomendable realizar una limpieza a fondo. Muchas empresas ofrecen un servicio adicional de limpieza profunda, perfecto si planeas vender o alquilar el piso.
6. Preparación para la siguiente etapa
Con el piso vacío y limpio, será más sencillo iniciar trámites de venta, reformas o alquiler, según sea tu objetivo.
Vaciar un piso después de un fallecimiento nunca es fácil, pero contar con profesionales especializados ayuda a que el proceso sea más rápido y llevadero, permitiendo a la familia centrarse en lo realmente importante.


